Mensaje Psicografiado durante la conferencia del
Dr. John Rhenals, en la semana de celebración del X Aniversario del Centro
Espírita Joanna de Angelis, por el médium Jorge Berrío Bustillo, la noche del
viernes 13 de noviembre de 2015, en el C.E. Joanna de Angelis, en Lima, Perú.
La
Educación del Espíritu es la misión de los trabajadores de Buena Voluntad. La
Doctrina Espírita es y será la Verdad Educadora de almas. Preparémonos en
nuestras casas como las verdaderas instituciones que iluminan las conciencias,
para lograr un despertar que lleve hacia la felicidad y la paz. En los actuales
momentos hay muchas corrientes de Espiritualismo que están distrayendo a muchos
trabajadores, sin una estructura doctrinaria que les lleve a comprender la
inmortalidad del alma y la Ley de la Reencarnación. Mis amigos y hermanos
Espíritas continúen trabajando con fidelidad a Kardec, el Apóstol de la Verdad Consoladora. Sientan
la alegría de servir a El Maestro Jesús, que dirige este mensaje enviando a sus
mensajeros para que nos canten las bellas melodías de la Verdad. No pierdan el
tiempo. Aprovechen la oportunidad que Dios les da. Son los llamados a la
construcción del Reino de los Cielos en la faz de la Tierra. Cuando estamos en
la Tierra encarnados, los avatares de las necesidades materiales nos distraen
por las impresiones que nuestros sentidos físicos nos hacen sentir, como si
fuéramos eternos en el campo físico y no nos observamos como Espíritus
inmortales que somos. Unámonos en el bien, retomemos el Estudio Doctrinario con
la alegría de conocer y comprender la verdad vivida y sentida.
Comienza un nuevo día para las almas sufridas
sin consuelo. La vida prosigue, los sufrimientos son aprendizajes, los dolores
son depurativos y las casas Espíritas deben conducir hacia la fe a las almas
sin un norte. Cada uno tiene una tarea diferente. Cada trabajador tiene su
campo de trabajo. Cuando se entiende este concepto, no debe existir ni celos ni
rivalidades entre las casas Espíritas, ni entre los servidores de Jesús.
Dejemos a
un lado las susceptibilidades para no obstaculizar el avance de la doctrina
como institución, con identidad y posicionamiento en la sociedad. Sintamos el
amor en el corazón y vibremos al unísono con los Guías y Mentores espirituales
para lograr una sintonía que armonice nuestro mundo interno, y sensibilice a
los que nos escuchen y los que visitan nuestras instituciones.
Adelante
Espíritas, sin desfallecer. Trabajemos con Jesús en nuestros corazones y con
Kardec en nuestro entendimiento. Reciban un abrazo muy amoroso de este
servidor, que desde este lado de la vida viene a decirles como testimonio que
las horas dedicadas a la Doctrina Espírita, a esta Verdad Consoladora, son el bienestar
para nuestros Espíritus en este mundo espiritual. Todos retornaremos tarde o
temprano a esta vida. Preparémonos sirviendo y amando, perdonando y
perseverando siempre en el bien. Se los digo hoy, feliz, desde este mundo:
Valió la pena ser espírita.
El amigo y hermano, Juan Ortiz.